Poner atención, disciplina, diligencia y corazón en la vida es lo que ha llevado a Fernando Socol a conquistar la cima, dirigir su bufete y ser una estrella en la gestión migratoria y sus leyes.
Por Avril Parrillat
Fotografías: Héctor Torres
La habilidad, empatía e historia de Fernando Socol lo llevaron a iniciar lo que hoy es una reconocida trayectoria como abogado migratorio en Estados Unidos. Conoce más sobre su trabajo en una entrevista exclusiva para Alto Perfil.
¿Qué representa para ti la responsabilidad de tener tu propia firma?
La ética es fundamental. Nosotros tenemos la responsabilidad de evaluar primero si califican y decirles si no es así por alguna razón. La gente depende de lo que les decimos. Hay mucha gente dispuesta a engañar y tomar el caso y fingir sorpresa cuando al final no resulta.
¿Qué retos destacan al hablar de leyes migratorias?
Muchos. El tema es muy complejo y en vez de facilitarse cada vez se complica más. Hay muchos requisitos y agencias de gobierno como el consulado, el Departamento de Estado, el servicio de migración, o en los casos que yo veo como visas de trabajo, además requieren también del ministerio del trabajo, así que hay que navegar todas estas estrategias y agencias en las que hay mucha burocracia y subjetividad. Se requiere de mucha experiencia y de conocer las idiosincrasias de cada consulado americano y de cada país ya que cambian mucho y tener mucha experiencia para saber cómo saldrá el caso del cliente, o si tiene problemas, qué podemos hacer para mejorar el caso. Por tanto es complejo y requiere de mucho análisis antes de empezar.
¿Cómo es la experiencia de servicio para un cliente mexicano que busque emigrar y contratar tus servicios?
Tenemos muchos clientes de México. México tiene una visa especial de trabajo llamada TN, por lo que estamos viendo a muchos mexicanos profesionistas con visas de trabajo como ingenieros, gente en el área de computación y otras que reciben ofertas de trabajo o quieren invertir en E.E.U.U en un negocio o ya tienen negocios de intercambio entre México y E.E.U.U y quieren formalizarlo con una visa de trabajo o de inversión, de importador o exportador o diferentes escenarios que hacen que continuamente recibimos a mucha gente de México.
Al ser una firma boutique, ¿cuál es para ti la importancia de contar con una fuerte red de apoyo y en qué beneficia esto a tus clientes?
Además de asesorar a nuestros clientes en temas migratorios, contamos con una red que los ayuda a encontrar la mejor zona escolar, las mejores propuestas para encontrar un hogar, contadores, asesores de seguros, Business Brokers y todos los expertos en los que se puede confiar para que tengan éxito. Les ahorramos tiempo y dolores de cabeza al referirlos con gente de confianza.
¿Qué es fundamental al generar una relación de confianza con los clientes que representas?
La honestidad. Cumplir con tu palabra y apoyar al cliente para llevarlo de la mano para ayudarlos, entenderlos y resolver las dudas que tengan durante el proceso.
El 2024 es un año clave electoral, ¿cómo afecta esto a las personas que buscan iniciar un trámite migratorio y qué les recomendarías?
En noviembre en EE.UU. tendremos una elección entre dos personas muy diferentes. Esto puede afectar porque uno de los candidatos está en contra de los inmigrantes. Él puede hacer daño, principalmente con la gente que se encuentra aquí con estatus ilegal, pero también aprieta con temas legales que buscan minimizar toda clase de inmigración. Eso no es bueno para el país ya que este necesita inmigrantes. El país es fuerte por ellos. El país necesita inmigrantes ya que tenemos una tasa muy baja de nacimientos; actualmente nacen 1.2 niños por familia y eso no es suficiente para crecer a futuro, por lo que sin inmigrantes no puede crecer. El presidente sí hace mucha diferencia. Si ese candidato toma poder, sería en enero del 2025, por lo que hasta entonces hay tiempo para hacer algunos trámites.
¿Cómo compaginas tu tiempo laboral con el que pasas en familia?
Tener un balance es crítico. Hace tiempo dedicaba más tiempo al trabajo y eso me llevó al Burn Out, cuando te quemas así, es muy difícil trabajar. Es fundamental tomar tiempo libre para hacer otras cosas y despejar tu mente. La vida no es todo trabajo y hacerlo te refresca para que al regresar seas más productivo.
